martes, 19 de diciembre de 2017

Esta Navidad...camina hacia la VIDA



El Dios de infinita bondad
que por la encarnación de su Hijo
y por su glorioso nacimiento
disipó las tinieblas del mundo.

Él, que por medio del ángel
quiso anunciar a los pastores
la gran alegría del nacimiento del Salvador.

Él, que unió la tierra con el cielo,
ilumine y llene de gozo nuestros corazones
 nos haga mensajeros de su Evangelio,
 nos conceda la abundancia de su paz y de su amor,
y nos haga partícipes de la Iglesia celestial.



Spei Mater
Asociación Publica de fieles por la Vida
www.speimater.com
www.proyecto-raquel.com
María Jose Mansilla Arcos
Presidente de Spei Mater

El PERDÓN nos libera


lunes, 11 de diciembre de 2017

Precisamente como el pastor[...] que va a buscar a la oveja perdida y, aunque esté oscuro, deja a las demás ovejas en un lugar seguro y va a buscar la que falta, va a buscarla.


Es precisamente éste el mensaje más profundo: la alegría de Dios. Un Dios a quien no le gusta perder. Y por ello, para no perder, sale de sí y va, busca. Es un Dios que busca a todos aquellos que están lejos de Él.

Precisamente como el pastor[...] que va a buscar a la oveja perdida y, aunque esté oscuro, deja a las demás ovejas en un lugar seguro y va a buscar la que falta, va a buscarla.

Nuestro Dios, por lo tanto, es un Dios que busca. Su trabajo es buscar: ir a buscar para volver a invitar.

En esencia, Dios no tolera perder a uno de los suyos. Esta será también la oración de Jesús el Jueves santo: "Padre, que no se pierda ninguno de los que me has dado".

Es, por tanto, un Dios que camina para buscarte y tiene una cierta debilidad de amor hacia aquellos que se han alejado más, que se han perdido. Va y les busca. Y, ¿cómo busca? Busca hasta el final. Como este pastor que va por la oscuridad buscando hasta que encuentra a la oveja perdida...
Dios busca porque piensa: "A este hijo no lo pierdo, ¡es mío! ¡No quiero perderlo!".

Él es nuestro Padre. Nos busca siempre.

Pero el trabajo de Dios no es sólo buscar y encontrar. Porque cuando nos encuentra, cuando encuentra a la oveja, no la deja a un lado ni pregunta: "¿Por qué te has perdido? ¿Por qué te has caído". Más bien la vuelve a llevar al sitio justo.

Podemos decir forzando la palabra que Dios reacomoda: acomoda otra vez a la persona que ha buscado y encontrado; de forma que, cuando el pastor la vuelve a llevar en medio de las demás, la oveja perdida no tenga que escuchar tú estás perdida, sino: tú eres una de nosotras...



(Homilía Papa Francisco en Santa Marta, 07 de noviembre de 2013)

El Perdón es una fuerza que resucita a una vida nueva e infunde el valor para mirar el futuro con esperanza


lunes, 4 de diciembre de 2017

Mensaje del Papa Francisco con motivo del Adviento


“La persona que está atenta – dijo - es la que, en el ruido del mundo, no se deja llevar por la distracción o la superficialidad”; mientras que la persona vigilante “es aquella que acoge la invitación a velar, es decir, a no dejarse abrumar por el desánimo, la falta de esperanza, la decepción”.